Al rededor de un año ha pasado desde que algo se ha escrito en este blog. No pienso engañar a las dos personas que se equivocaron de link y terminaron leyendo esta entrada: lo hago única y exclusivamente porque quedé varado cerca de una hora sin nada qué hacer.
Sería mentira decir que no he querido compartir algo aquí pues en el período vacacional contaba con un registro de posibles temas; material audiovisual inclusive. Espero encontrar la motivación necesario para llenar los textos que pude haber escrito en algún momento pero por el momento quiero ocuparme con mi última actividad. Y digo la última porque de hecho aún no ha concluido.
Ya tiene algunos -¿varios?- años que se ha impulsado el uso de medios alternativo al automóvil en la ciudad (de México si es que el surcoreano que alguna vez entró aquí se volvió a equivocar). Contrario a lo que uno esperaría, este joven a quien se le enseñó a dejar las rueditas de entrenamiento de forma paralela a las leyes de los radicales (o sea en prepa…) viaja a la universidad en es bicicleta. No es constante el uso mas cuando las horas de sueño lo permiten lo hago con gusto.
Esta introducción no tuvo más que el fin de comentar qué sucede si un día llueve y te viniste en bici a la escuela.
Lo primero fue el esperar tres horas, en las que aproveché para comer y acabar una tarea ( cosa que no hubiera logrado en el hogar). Las consecuencias más allá no fueron mayores. Pedalee un tramo sobre una avenida en la misma forma en la que lo hago sin una humedad relativa del 100%. Decidí no continuar por el hecho de no tener salpicaduras que evitarán el paso del agua por mi espalda hacia mis pantalones.
Sin embargo, la solución fue el transporte público. Aparentemente no muchos lo saben (y por eso esta entrada pitera) pero es posible después de las 22:00 ingresar al MB( o cualquier nombre sin sentido que tenga el transporte equivalente en su ciudad provinciana favorita) con una bicicleta.
El problema es que a unos minutos antes de mi ingreso por derecho, las instalaciones de veían llenas. Pero a unos 15 minutos de eso no fue más una dificultad.